Debilidad o fatiga de causa desconocida
La debilidad y la fatiga son afecciones diferentes. A veces, las personas piensan que están débiles cuando, en realidad, están fatigadas. Para obtener la ayuda adecuada, es fundamental entender la diferencia entre debilidad y fatiga.
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Debilidad. Es cuando los músculos no están tan fuertes como deberían. Se puede desarrollar rápida o lentamente con el paso del tiempo. Puede afectar todos los músculos (debilidad generalizada) o solo una parte del cuerpo. Entre las causas de la debilidad generalizada, se encuentran la disminución de la actividad física, la pérdida de tejido muscular causada por períodos largos de inactividad, niveles anormales de electrolitos y el uso de ciertos medicamentos, como los corticosteroides. Entre las causas de la debilidad en músculos específicos, se encuentran los ataques cerebrales, los daños en los nervios, las lesiones en los discos de la columna vertebral y los trastornos neurológicos, como la esclerosis múltiple. Los síntomas de debilidad varían según el músculo afectado.
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Fatiga. Es cuando la persona se siente muy cansada, agotada o con poca energía. Es cuando siente que necesita un buen descanso o cuando tiene tan poca energía que cualquier actividad le parece difícil. Puede suceder cuando está muy activa o cuando no está lo suficientemente activa, cuando está estresada, no duerme bien o lleva una alimentación poco saludable. Entre otras causas de fatiga, se encuentran las infecciones virales, los problemas emocionales, en especial la depresión, y las enfermedades graves, como la insuficiencia cardíaca y el cáncer. La fatiga también es uno de los efectos secundarios de algunos medicamentos. La fatiga suele ser un signo que indica que algo más puede estar sucediendo.
Según el examen de hoy, no se pudo determinar con exactitud la causa de los síntomas. Pero, en este momento, los síntomas no parecen ser un signo de ninguna enfermedad grave. Controle los síntomas y busque atención médica según se indica a continuación.
Cuidados en el hogar
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Descanse en su hogar hoy. No se sobreexija.
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Tome los medicamentos como le indicaron.
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En los próximos días, beba más líquidos de lo habitual, a menos que el proveedor de atención médica le haya pedido que restrinja la cantidad de líquidos por alguna otra razón. No se saltee ninguna comida.
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A menos que se le indique lo contrario, continúe tomando sus medicamentos recetados.
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Comuníquese con el proveedor de atención médica si tiene alguna pregunta o inquietud.
Visitas de seguimiento
Programe una cita de seguimiento con el proveedor de atención médica, o según le hayan indicado.
Cuándo debe buscar atención médica
Llame al proveedor de atención médica de inmediato si se presenta cualquiera de las siguientes situaciones:
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Síntomas que empeoran o aparición de nuevos síntomas
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Los síntomas no empiezan a aliviarse dentro de los siguientes 2 días
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Tiene sudores nocturnos
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Tiene los ganglios linfáticos hinchados
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Tiene dolor
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Tiene fiebre de 100.4 °F (38 °C) o más, o según le haya indicado el proveedor de atención médica
Llame al 911
Llame al 911 ante cualquiera de los siguientes síntomas:
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Dolor en el pecho, el brazo, el cuello, la mandíbula o la parte superior de la espalda
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Dificultad para respirar
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Entumecimiento o debilidad en la cara, un brazo o una pierna
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Arrastra las palabras, confusión, dificultad para hablar, caminar o ver
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Sangre en el vómito o en las heces (de color negro o rojo)
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Dolor de cabeza intenso
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Pérdida del conocimiento, como un desmayo
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Pérdida de la capacidad de caminar
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Debilidad que empeora en pocos días o menos
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Dificultad para levantar la cabeza cuando está acostado
Online Medical Reviewer:
Eric Perez MD
Online Medical Reviewer:
Ronald Karlin MD
Online Medical Reviewer:
Tara Novick BSN MSN
Date Last Reviewed:
1/1/2023
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